Repitiendo la misma defensa zonal del tercer partido, las "Águilas" igualaron 2-2 la final de Dimayor. En ataque fue clave el trabajo de BJ. Pucket y las 12 asistencias de Erik Carrasco
En Maipú se vivió una fiesta. El gimnasio Boston College se llenó una hora antes que se iniciara el partido y los jugadores del equipo de Maipú entraron con la misma concentración del día sábado y desde el inicio dejaron en claro que la estrategia sería la misma que utilizaron en el triunfo anterior. Y nuevamente les funcionó, pues vencieron 105-93 a Liceo Mixto e igualaron la serie de la final de Dimayor 2-2
Antes del encuentro en la banca de Boston College fueron claros: "Caballo buen repite" y lo respetaron a tal punto que el técnico Carlos Ávarez no quiso mover mucho sus piezas y el primer cambio sólo se registró en la mitad del segundo cuarto
Si en la noche anterior las claves fueron el aporte ofensivo de Joe Chapman y Erik Carrasco, ayer la figura fue BJ Pucket, quien no sólo ganó bajo el tablero, sino que se dio el lujo de convertir tres triples. A eso se sumó la conducción de Carrasco, que aportó con 12 asistencias
Liceo Mixto respondió con una presión a cancha completa, que mantuvo durante casi toda la segunda mitad del encuentro. Y además, en ataque respondieron con cinco triples de Galo Lara y, sobre el final, con Patricio Briones, quien anotó 10 de sus 16 puntos con tiros libres. Sin embargo, cuando arremetía Mixto, Boston capturaba rebotes que terminaban en explosivos ataques que eran bien aprovechadas por Chapman, Costa y Pucket
"La tarea era cerrar los rebotes defensivos y de ahí a correr, pues eso a ellos no les gusta para nada", indicó el ala pivote Lucas Costa
En los últimos minutos explotó con mayor fuerza el gimnasio maipucino. En la banca de Liceo Mixto no comprendían cómo no fueron capaces de romper una defensa que parece tan previsible, pero que funcionó a la perfección
Así se escribieron dos nuevos capítulos de esta final, cuando los andinos venían a sellar el campeonato, Boston College los hizo jugar en una zona peligrosa, de la que nunca pudieron escapar
Ahora todo parte de cero y el miércoles Mixto sale presionado por mantener la localía
14 de enero se disputará el próximo partido en el gimnasio Nº4 de San Felipe
Camarín de Liceo Mixto fue un incendio
A lo largo del partido, los jugadores de Liceo Mixto se hablaron muy poco. Estaban ofuscados. Lograban acercarse, pero cometían errores y le devolvían la ventaja a Boston College
En el entretiempo la discusión subió de tono e, incluso, se escuchaba a Patrick Sáez recriminar a sus compañeros diciéndoles que: "así no me dan ganas de seguir en este equipo"
La ofuscación fue reconocida y comprendida por el técnico Pablo Ares. "Eso es verdad, estábamos todos molestos. Cuando lográbamos crear buenas oportunidades, nosotros perdíamos balones y nos íbamos del juego", afirmó el DT
"Es cierto que hubo discusión, pero no fue con los jugadores ni tampoco con el técnico", reveló Sáez, en clara alusión a los dirigentes.
En el camarín de Boston, era distinto, pues no sólo habían logrado igualar la serie, sino que dejaron en nada la promesa de "barrida" que le habían hecho los andinos en la previa de la final
"No quiero entrar en su juego, pero hay una frase que es muy cierta, que dice que: 'por la boca muere el pez', dijo el pivote brasileño Lucas Costa
En Maipú se vivió una fiesta. El gimnasio Boston College se llenó una hora antes que se iniciara el partido y los jugadores del equipo de Maipú entraron con la misma concentración del día sábado y desde el inicio dejaron en claro que la estrategia sería la misma que utilizaron en el triunfo anterior. Y nuevamente les funcionó, pues vencieron 105-93 a Liceo Mixto e igualaron la serie de la final de Dimayor 2-2
Antes del encuentro en la banca de Boston College fueron claros: "Caballo buen repite" y lo respetaron a tal punto que el técnico Carlos Ávarez no quiso mover mucho sus piezas y el primer cambio sólo se registró en la mitad del segundo cuarto
Si en la noche anterior las claves fueron el aporte ofensivo de Joe Chapman y Erik Carrasco, ayer la figura fue BJ Pucket, quien no sólo ganó bajo el tablero, sino que se dio el lujo de convertir tres triples. A eso se sumó la conducción de Carrasco, que aportó con 12 asistencias
Liceo Mixto respondió con una presión a cancha completa, que mantuvo durante casi toda la segunda mitad del encuentro. Y además, en ataque respondieron con cinco triples de Galo Lara y, sobre el final, con Patricio Briones, quien anotó 10 de sus 16 puntos con tiros libres. Sin embargo, cuando arremetía Mixto, Boston capturaba rebotes que terminaban en explosivos ataques que eran bien aprovechadas por Chapman, Costa y Pucket
"La tarea era cerrar los rebotes defensivos y de ahí a correr, pues eso a ellos no les gusta para nada", indicó el ala pivote Lucas Costa
En los últimos minutos explotó con mayor fuerza el gimnasio maipucino. En la banca de Liceo Mixto no comprendían cómo no fueron capaces de romper una defensa que parece tan previsible, pero que funcionó a la perfección
Así se escribieron dos nuevos capítulos de esta final, cuando los andinos venían a sellar el campeonato, Boston College los hizo jugar en una zona peligrosa, de la que nunca pudieron escapar
Ahora todo parte de cero y el miércoles Mixto sale presionado por mantener la localía
14 de enero se disputará el próximo partido en el gimnasio Nº4 de San Felipe
Camarín de Liceo Mixto fue un incendio
A lo largo del partido, los jugadores de Liceo Mixto se hablaron muy poco. Estaban ofuscados. Lograban acercarse, pero cometían errores y le devolvían la ventaja a Boston College
En el entretiempo la discusión subió de tono e, incluso, se escuchaba a Patrick Sáez recriminar a sus compañeros diciéndoles que: "así no me dan ganas de seguir en este equipo"
La ofuscación fue reconocida y comprendida por el técnico Pablo Ares. "Eso es verdad, estábamos todos molestos. Cuando lográbamos crear buenas oportunidades, nosotros perdíamos balones y nos íbamos del juego", afirmó el DT
"Es cierto que hubo discusión, pero no fue con los jugadores ni tampoco con el técnico", reveló Sáez, en clara alusión a los dirigentes.
En el camarín de Boston, era distinto, pues no sólo habían logrado igualar la serie, sino que dejaron en nada la promesa de "barrida" que le habían hecho los andinos en la previa de la final
"No quiero entrar en su juego, pero hay una frase que es muy cierta, que dice que: 'por la boca muere el pez', dijo el pivote brasileño Lucas Costa
Por Enzo Garrido
Foto: Héctor Retamal
Fuente: Diario La Tercera
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