Luego de no ser renovado por la directiva, el ahora ex técnico del Campanil realizó su autocrítica respecto a los siete años que estuvo a cargo del plantel estudiantil.
Finalizó una era en el básquetbol profesional de la Universidad de Concepción, y con ello, el primero en decir adiós fue su técnico, Jorge Luis Álvarez, a quien la directiva decidió no renovarle el vínculo.
Antes de partir, el ahora ex entrenador del Campanil cestero hizo con Diario Concepción su autocrítica respecto al irregular año que tuvo la UdeC en su paso a la Liga Nacional.
- ¿Con qué sensación se queda cuando termina un ciclo de 7 años?
- Obviamente no es agradable terminar un ciclo, más en este club y en esta ciudad en la que encontré un lugar en el que me sentí muy cómodo, pero (Alex) Ferguson hay uno sólo y es muy difícil que un ciclo se termine ganando y feliz, eso es una realidad.
- ¿Qué es lo que más lo complica de dejar de dirigir a la Universidad de Concepción?
- Me duele terminar el ciclo y me duele hacerlo de esta forma. Tengo la conciencia tranquila de que hice todo lo posible hasta el final, e hice alguna evaluación mía por el paso por el club, en donde nosotros tuvimos que armar los equipos en base a estudiantes universitarios, que de hecho fue una de las cosas que nos reconocieron incluso por el rector. Lo armamos, y tratamos de entrenar de la mejor forma. El equipo siempre fue protagonista, pese que algunas veces perdió finales, y en otras fue campeón, pero siempre estuvo luchando. A la larga creo que se hizo un buen trabajo.
- ¿Qué errores siente que se cometieron este año que no se habían producido antes?
- Siempre fuimos catalogados como un equipo que nos faltaba algún liderazgo y por eso perdíamos finales, pero siempre nuestras series regulares fueron impecables. Este año fue al revés, la primera fase fue aceptable, pero la segunda fue muy mala, con siete partidos ganados y siete perdidos, nunca habíamos tenido una serie así.
- ¿En la parte técnica, en qué se falló?
- Creo que hubo errores puntuales en lo que se refiere a mi trabajo, en la elección del segundo extranjero, que no nos salió bien nunca y pienso que el equipo en su contexto como juego no respondió a las expectativas que habían.
- ¿No se tomó nunca la regularidad que traían en torneos anteriores?
- No, nunca. Si hay una palabra que define nuestro desempeño en la segunda parte del año es irregular, no sólo de un partido o fin de semana al otro, sino también en espacios reducidos de tiempo, de un cuarto al otro dentro de un mismo encuentro. Eso fue una constante durante todo el torneo.
- ¿Perdieron en el ámbito defensivo, algo que siempre fue una de sus características?
- Claramente. En siete años nunca habíamos sido cuestionados en ese aspecto. Todo lo contrario, éramos elogiados por cómo el equipo defendía, pero este año la realidad es que no fue así.
- Con lo repentino que fue, ¿cuánto los afectó el cambio de Dimayor a Liga Nacional este año?
- Creo que en el principio nos afectó en el sentido que con la llegada de los chicos Sub 19, no por responsabilidad de ellos, perdimos un poco de lo colectivos que éramos. De todas formas, cuando todos estamos bien y al servicio del equipo, ganamos 20 partidos seguidos como en la fase regular de la Libcentro. A la larga puede ser que nos perjudicó, pero también tuvimos
partidos buenos.
- ¿Cuál es el mejor recuerdo que se lleva de estos siete años?
- En lo personal, más allá de las críticas personales que siempre van a estar, me queda haber sentido durante todo este tiempo el respeto en general de la gente del club y de la universidad. En cuanto al trabajo en sí, el haber reforzado con jugadores universitarios un equipo competitivo.
- Y en lo que respecta a los logros deportivos, ¿cuál es el que más va a recordar?
- No te voy a negar que de todos los torneos que se jugaron por muchos años siempre al menos ganamos uno, excepto este año. Se consiguió el nacional universitario, dos títulos de Dimayor, el Apertura 2009 y el de 2012, y el Dimayor Centro - Sur que se ganó de local. Además, haber participado en torneos internacionales.
- ¿Se queda en Chile?
- Estoy muy bien acá, y si pudiera tener alguna opción con otro equipo de la Liga Nacional me quedaría sin lugar a dudas.
DIARIO DE CONCEPCION
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