En diálogo con Cooperativa.cl, Erik Carrasco y Claus Prutzmann se mostraron confiados en hacer un buen papel en el torneo que se inicia este martes en Puerto Montt y clasificar al Premundial de México 2009.
Así como el sur de Chile ofrece maravillas naturales dignas de conocer y disfrutar, el baloncesto encuentra en estas tierras el interés y entusiasmo que no logra concitar masivamente en la capital.
Esta fue una de las razones en que se basó la federación cestera de nuestro país para designar a Puerto Montt como sede de la XLIII versión del Campeonato Sudamericano de Baloncesto que arrancará este martes y que reparte cuatro plazas al Premundial de México 2009.En la capital de la Región de Los Lagos, pues, se hallan las seis selecciones competidoras que lucharán por los anhelados cupos. De ellas, por cierto, Chile concentra todas las miradas, ya que su calidad de país anfitrión alimenta las esperanzas de alcanzar la gloria.
El quintero nacional exhibió un irregular rendimiento previo al inicio del certamen puertomontino. Sorprendió a todo el mundo quedándose con la Copa Carranza en Valparaíso, incluyendo una histórica victoria ante Brasil, pero llegó el "Top 4" de Punta Arenas y los dirigidos de Daniel Allende bajaron ostensiblemente su nivel, cayendo en los tres compromisos que disputaron ante Brasil, Argentina y Uruguay.
El "cauteloso" optimismo de Carrasco y Prutzmann
Dos de las principales figuras chilenas, Erik Carrasco y Claus Prutzmann, en charla con Cooperativa.cl, no quisieron crear falsas expectativas. Saben que las selecciones que visitan la ciudad de los salmones por estos días tienen un poderío innegable que pondrá cuesta arriba la misión. Aún así, de sus palabras se desprende optimismo y tranquilidad de cara al debut de este martes ante Uruguay.
"Ni en Valparaíso éramos los mejores ni en Punta Arenas los peores. Lo que hicimos en la Copa Carranza fue bastante bueno y nos sirvió para darnos cuenta cómo tenemos que jugar para ganar los partidos", comentó el base Carrasco. En tanto, el espigado pívot Prutzmann dijo no importarle en demasía el nivel de los pleitos anteriores, porque la hora de la verdad será a partir de este martes. "Desde el inicio de la Copa Carranza sabíamos que el objetivo principal era el Sudamericano, independiente de los resultados. Igualmente las victorias son importantes para lo anímico, aunque no tuvimos lamentablemente la continuidad y el equilibrio necesario".
En particular, el estreno supone una "involuntaria" ventaja para los nacionales, pues uno de los principales valores celestes, el armador Martín Osimani, se perderá el campeonato por una lesión. Frente a la noticia, Carrasco optó por la cautela, recordando los dos duelos previos ante los "charrúas". "Nosotros ganamos con Osimani y perdimos sin él, así que da lo mismo. Hay que ganar igual habiendo 10 Osimani”, desafió.
"Tenemos que preocuparnos más de nosotros que de lo que pueda hacer el contrincante. Si analizamos la forma de jugar de ellos, igual creo que va a sentir un poco la ausencia de él", expresó por su parte Prutzmann.
En cuanto a las reales posibilidades de Chile, la idea –dijo el base de Boston College- es quedar entre los tres o cuatro primeros para así poder viajar a México a disputar el Premundial. En tanto, el jugador de Deportivo Valdivia no escondió sus recaudos cuando se le consultó si el quinteto está preparado para pensar en el título. "Es complicado, aunque a veces se puede tener una noche inspirada y hacer la gracia".
En cuanto a las claves tácticas de los partidos que deberá afrontar el representativo nacional, Prutzmann sindicó al trabajo defensivo como la fortaleza que se debe explotar. "Tenemos que llevar los partidos a un score bajo, en donde los elencos contrarios no deben sobrepasar los 70 ó 75 puntos. Creo que en la defensa deben estar nuestros puntos fuertes y nuestras reales opciones para estar entre los cuatro clasificados".
"Para Chile no hay ningún rival débil", consideró Erik Carrasco, dejando en claro el respeto que siente por la jerarquía de sus adversarios, cuyos planteles están conformados en gran parte por jugadores que militan en Europa. Pese a loa mesura de su compañero, Prutzmann cree que teniendo una jornada de inspiración se puede vencer a dos potencias mundiales. "El equipo que marca una diferencia importante es Argentina. Pero creo que teniendo una buena noche y estando concentrados podemos ganarle a Brasil y Uruguay sin problemas", concluyó.
La cuenta regresiva para el inicio de la competencia está en marcha. Sin lesionados y con mucha ilusión a cuestas, el plantel cestero nacional espera brindar una alegría a todo el público que seguramente hará sentir la condición de local en el Arena Puerto Montt.
Por: Por Cristian González Farfán
Así como el sur de Chile ofrece maravillas naturales dignas de conocer y disfrutar, el baloncesto encuentra en estas tierras el interés y entusiasmo que no logra concitar masivamente en la capital.
Esta fue una de las razones en que se basó la federación cestera de nuestro país para designar a Puerto Montt como sede de la XLIII versión del Campeonato Sudamericano de Baloncesto que arrancará este martes y que reparte cuatro plazas al Premundial de México 2009.En la capital de la Región de Los Lagos, pues, se hallan las seis selecciones competidoras que lucharán por los anhelados cupos. De ellas, por cierto, Chile concentra todas las miradas, ya que su calidad de país anfitrión alimenta las esperanzas de alcanzar la gloria.
El quintero nacional exhibió un irregular rendimiento previo al inicio del certamen puertomontino. Sorprendió a todo el mundo quedándose con la Copa Carranza en Valparaíso, incluyendo una histórica victoria ante Brasil, pero llegó el "Top 4" de Punta Arenas y los dirigidos de Daniel Allende bajaron ostensiblemente su nivel, cayendo en los tres compromisos que disputaron ante Brasil, Argentina y Uruguay.
El "cauteloso" optimismo de Carrasco y Prutzmann
Dos de las principales figuras chilenas, Erik Carrasco y Claus Prutzmann, en charla con Cooperativa.cl, no quisieron crear falsas expectativas. Saben que las selecciones que visitan la ciudad de los salmones por estos días tienen un poderío innegable que pondrá cuesta arriba la misión. Aún así, de sus palabras se desprende optimismo y tranquilidad de cara al debut de este martes ante Uruguay.
"Ni en Valparaíso éramos los mejores ni en Punta Arenas los peores. Lo que hicimos en la Copa Carranza fue bastante bueno y nos sirvió para darnos cuenta cómo tenemos que jugar para ganar los partidos", comentó el base Carrasco. En tanto, el espigado pívot Prutzmann dijo no importarle en demasía el nivel de los pleitos anteriores, porque la hora de la verdad será a partir de este martes. "Desde el inicio de la Copa Carranza sabíamos que el objetivo principal era el Sudamericano, independiente de los resultados. Igualmente las victorias son importantes para lo anímico, aunque no tuvimos lamentablemente la continuidad y el equilibrio necesario".
En particular, el estreno supone una "involuntaria" ventaja para los nacionales, pues uno de los principales valores celestes, el armador Martín Osimani, se perderá el campeonato por una lesión. Frente a la noticia, Carrasco optó por la cautela, recordando los dos duelos previos ante los "charrúas". "Nosotros ganamos con Osimani y perdimos sin él, así que da lo mismo. Hay que ganar igual habiendo 10 Osimani”, desafió.
"Tenemos que preocuparnos más de nosotros que de lo que pueda hacer el contrincante. Si analizamos la forma de jugar de ellos, igual creo que va a sentir un poco la ausencia de él", expresó por su parte Prutzmann.
En cuanto a las reales posibilidades de Chile, la idea –dijo el base de Boston College- es quedar entre los tres o cuatro primeros para así poder viajar a México a disputar el Premundial. En tanto, el jugador de Deportivo Valdivia no escondió sus recaudos cuando se le consultó si el quinteto está preparado para pensar en el título. "Es complicado, aunque a veces se puede tener una noche inspirada y hacer la gracia".
En cuanto a las claves tácticas de los partidos que deberá afrontar el representativo nacional, Prutzmann sindicó al trabajo defensivo como la fortaleza que se debe explotar. "Tenemos que llevar los partidos a un score bajo, en donde los elencos contrarios no deben sobrepasar los 70 ó 75 puntos. Creo que en la defensa deben estar nuestros puntos fuertes y nuestras reales opciones para estar entre los cuatro clasificados".
"Para Chile no hay ningún rival débil", consideró Erik Carrasco, dejando en claro el respeto que siente por la jerarquía de sus adversarios, cuyos planteles están conformados en gran parte por jugadores que militan en Europa. Pese a loa mesura de su compañero, Prutzmann cree que teniendo una jornada de inspiración se puede vencer a dos potencias mundiales. "El equipo que marca una diferencia importante es Argentina. Pero creo que teniendo una buena noche y estando concentrados podemos ganarle a Brasil y Uruguay sin problemas", concluyó.
La cuenta regresiva para el inicio de la competencia está en marcha. Sin lesionados y con mucha ilusión a cuestas, el plantel cestero nacional espera brindar una alegría a todo el público que seguramente hará sentir la condición de local en el Arena Puerto Montt.
Por: Por Cristian González Farfán
Fuente: Cooperativa.cl
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