En un gran partido de básquetbol, el Colegio San Ignacio El Bosque venció al Colegio San Ignacio Alonso Ovalle y se quedó con el título de la división de Honor de la categoría Superior. Ocho puntos fue la diferencia final, pero la verdad es que en la cancha no se vio tanta diferencia.
No sólo un ambiente de final se respiraba de cara al segundo partido definitorio del día en la Scuola Italiana, sino que las barras de ambos colegios se encargaron de recordar que también se trataba de un clásico. Y en la cancha, se vivió cómo tal.
El primer periodo tuvo un comienzo “explosivo”. El “Alonso Ovalle” salió con todo en busca de la ventaja inicial, cosa que consiguió merced a la gran movilidad de Torres y Pavez. Pero los de “El Bosque” no se dejaron amedrentar, reaccionaron a tiempo y se fueron arriba en el marcador por 14 a 11.
El segundo cuarto fue todo para los de Avenida Pocuro. Un par de fouls técnicos del SIAO facilitaron el accionar de el SIEB (que vistió de negro) y llegaron a ponerse 10 puntos arriba justo antes del final del cuarto, 28-18 para los de negro.
En la segunda fracción, el Colegio San Ignacio Alonso Ovalle salió con muchas ganas con el fin de emparejar el marcador. Dichas ganas le jugaron en contra en un principio, ya que estuvieron poco certeros bajo el cesto, llegando incluso a quedar 17 puntos abajo. Sin embargo, la reacción final en el tercer periodo les permitió volver a acortar cifras y quedar a ocho puntos (39-31) con ocho minutos más por jugar.
El último cuarto fue “combo a combo”. Los puntos se sucedían en ambos aros y la ventaja no se lograba disminuir ni aumentar. El gran nivel se mantuvo hasta el final del partido, lo que se tradujo en la victoria final del SIEB por 49-41 y la consagración como campeón del Básquetbol Copa Soprole UC.
Una de las buenas figuras del San Ignacio Alonso Ovalle fue Nicolás Pavez, el jugador hizo su reflexión tras la gran final: “Nos faltó la determinación y la garra que sí tuvimos en la semi final. Hoy no la tuvimos y ellos son justos ganadores, conozco a varios de ellos y los felicito, pero también espero poder tener una revancha”.
Por los vencedores, la palabra corrió por parte de Alejandro Molina (San Ignacio El Bosque): “Fue un partido apretado, cómo esperábamos que fuera, pero por suerte pudimos poner la intensidad necesaria y ganar la final, creo que es merecido por el esfuerzo que pusimos todo el año y es un premio para el equipo. Como nos pidió el profe, pusimos la vida en cada pelota y por eso somos campeones”.
la catolica.cl
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