DT Francisco González sostiene que es "gratificante trabajar con niños que no hacen problemas y no fallan".
Bajo la dirección del cestero profesional Francisco González, los niños de la Escuela Santa María despliegan su talento en los torneos de básquetbol escolar de Puerto Montt.
Según cuenta González, en estos momentos se encuentra retirado de la actividad, por lo que no participa del torneo Libsur, por diversos motivos, como las bajas remuneraciones que le pagan a los deportistas y también por el nivel de la competencia.
Sin embargo, no descarta retomar su carrera en este deporte si en el camino aparece una buena oferta.
Por ahora está abocado a su trabajo con los pequeños basquetbolistas de la Escuela Santa María.
González estima que Puerto Montt dispone de las condiciones como para contar con una escuadra en la liga profesional, como la Movistar. "Lo que pasa es que no hay apoyo para este deporte desde el mundo privado y desde el municipio", enfatiza.
El deté critica el que ha pasado un año desde el Campeonato Mundial Femenino Sub-19, "pero no pasó nada. Todo se lo lleva el fútbol, y el básquetbol, nada", reclama.
De su actual labor, sostiene que el trabajar con los menores de este establecimiento constituye una "experiencia gratificante".
González asegura estar contento con su trabajo. "Estos niños nunca fallan y entregan un cariño inmenso todos los días", subraya.
El entrenador describe a sus pupilos como unos niños que "nunca hacen problema por algo".
Francisco González había trabajado en otros establecimientos educacionales y también había dirigido en series menores de clubes profesionales.
En la Escuela Santa María hay unos 100 niños que están vinculados con la actividad cestera durante el presente año.
Diario El Llanquihue
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