La diferencia de edad de los jugadores y el escaso tiempo previo a la competencia, hizo que se haya planificado un trabajo diferenciado con cada elemento, con la idea de que lleguen en un buen nivel al inicio de torneo y poco a poco lleguen a lo óptimo.
Anómala por decirlo menos, con respecto a años anteriores, será la preparación del cuadro de Liceo Mixto de cara al inicio del torneo Dimayor que se comenzará a jugar posterior a fiestas patrias, ya que se deberá realizar un trabajo bastante complejo y difícil, principalmente por las diferencias que hay en el plantel y el escaso tiempo de preparación que habrá para dar el vamos al torneo.
Al respecto el preparador físico del plantel, Renato Maldonado, sostiene que “vamos a tener que recurrir a todas las estrategias y a la creatividad, ya que no será un año normal y cualquier deporte que se jacte de profesional, no admite tiempos de inactividad y a pesar de que hacen deporte los jugadores, no es lo mismo prepararse para un torneo profesional, ya que son cosas muy distintas”.
Esto obligará a hacer una planificación personal y muy fina, por lo complejo del calendario, de manera de evitar lesiones y que el físico no caiga en excesos.
El trabajo comenzará con las mediciones personales de cada elemento y analizar las curvas de rendimiento, con la idea de afrontar las cargas diferenciadas a cada jugador, de acuerdo a la edad y el físico.
A ello, y otro punto que lo hace más complejo, es que la preparación física debe mezclarse con la puesta a punto basquetbolística, por lo cual se deberá someter al plantel a un entrenamiento integrado combinando lo físico, lo técnico y lo táctico, para optimizar los tiempos que serán muy cortos.
El otro punto, es que se comenzará a trabajar menos que en un pretemporada normal, con solamente una jornada diaria de entrenamiento, a diferencia de trabajos en triple turno que se hacían anteriormente y eso que se comenzó dos semanas antes y gratis, para llegar en una mejor condición física.
“Tenemos tres jugadores que comparten trabajo, deporte, familia y el factor edad, por lo que sin duda debemos hacer trabajo diferenciado y arrancamos con el perfil sinántropo métrico de cada deportista donde se evalúan 40 puntos y luego planificar los ejercicios de manera individual”, sostuvo Maldonado.
Se cree que se tendrá que afrontar toda la temporada con trabajo diferenciado a cada elemento del plantel para equiparar los físicos, ya que los más jóvenes tienen mayor ventaja comparativa y tienen más facilidad de ponerse a punto.
El llegar al nivel óptimo de rendimiento, como ha ocurrido en años anteriores será muy difícil este año, por el tiempo de preparación que se tendrá, ya que se escapa a tiempos y condiciones normales de deportistas de alto rendimiento, pero de todas formas se tratará de optimizar los rendimientos, ya que es una obligación ser protagonistas y este año a pesar de todo no se puede dejar de lado el favoritismo.
La idea aunque el plantel se ha mermado, es mantener la mística y el tratar de lograr triunfos deportivos de la mano de campeonatos, si bien este año será mucho más difícil y por sobretodo se deberán cuidar en lo físico, ya que con una preparación menos profesional se estará mucho más expuesto a tener lesiones, que en los últimos años ha sido un verdadero problema para el cuadro liceano.
Los Andes Hoy
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