LIGA NACIONAL MOVISTAR VS DIMAYOR, LUCHA POR EL BASQUETBOL DE CHILE

Hace poco más de 15 días, Deportes Castro se tituló campeón de la Liga Nacional Movistar tras vencer en la final a Boston College en una serie que tuvo intensidad física y a ratos buen ritmo basquetbolístico. Paralelamente, Dimayor comenzó a disputar su etapa de playoffs y en estos días las semifinales entre la U. de Concepción ante Unión Española y Liceo Mixto frente a Español de Talca ofrecen partidos con, al menos, resultados estrechos.

Así las cosas, no resulta fácil emitir un juicio y señalar dónde está el mejor básquetbol del país, si en la Liga Nacional o en Dimayor. Quizás un dato iluminador al respecto sea el resultado del partido amistoso que jugarán hace algunas semanas la Universidad de Concepción y Los Leones de Quilpué, y que dejó como ganador al cuadro penquista en desmedro del equipo de la Quinta Región, que como carta de presentación tenía haber alcanzado una semifinal en la Liga Nacional y que, además, será el único representante chileno en la Liga de las Américas. Pero, ¿es este el mejor indicador para decir que Dimayor es más fuerte? Al parecer no, quizás sería bueno jugar una especie de “Supercopa” que enfrente a los campeones de ambas competencias, sin embargo, esta idea sería irrealizable en la práctica, pues Deportes Castro ya dejó ir a algunas de sus figuras, incluidos sus dos extranjeros. La “Supercopa” no enfrentaría a los planteles que alcanzaron el título de las competencias, no en el caso del campeón de la Liga.

Como sea, la Liga Nacional parece tener mejores argumentos para situarse como mejor competencia. A favor de ésta juega su mayor cantidad de equipos participantes (18 equipos en la Liga versus 8 en Dimayor) y una mejor cobertura del territorio. Además, la Liga desarrolló un campeonato de juveniles y obligó a que uno de éstos estuviera en cancha los primeros tres cuartos de cada partido adulto. Eso vale.

Del otro lado, Dimayor no cumplió con algunas cosas que prometió en el inicio, como por ejemplo la televisación de sus partidos (cuestión que la Liga sí realizó por Movistar). Además, la competitividad de algunos equipos de Dimayor queda en entredicho si se piensa en Municipal Curacaví, que sin ganar un solo partido se metió en playoffs, y adivinen qué: perdió su serie 0-3 ante la U. de Concepción.

Con todo, la Liga Nacional igual extraña a las instituciones que hoy juegan las semifinales de Dimayor y también a equipos como la Universidad Católica y Sokol de Antofagasta. Si estos se sumaran, el campeonato sería más entretenido, competitivo y sí concentraría el mejor básquetbol del país.

Sin poder responder dónde están los mejores, parece claro que estar separados no es lo mejor para el básquetbol criollo. La Liga Nacional parece tener un mejor formato y resultaría del todo necesario que tuviera la generosidad de recibir a aquellos que no están en ella. Del otro lado, los que no están debieran tener voluntad para sumarse. Obvio, la cuestión no es tan simple, pero en la humildad de ambas partes estará el acuerdo, no en el “gallito” de saber quién es mejor.

A.V.
Solobasquet