COPA CHILE: OSORNO VENCE A DEPORTIVO VALDIVIA EN EL REGRESO DEL SUPERCLÁSICO

Rodrigo Muñoz, con 13 tantos, fue la mejor mano del CDV Osorno Básquetbol 71, Deportivo Valdivia 55 En el regreso de los superclásicos, el cuadro del Rahue se impuso al Club Deportivo Valdivia, en un duelo de poco básquetbol y muchas imprecisiones. El vencedor fue quien menos se equivocó, sacando a su vez gran provecho de los errores de su rival. En el cuadro ganador las mejores manos fueron Cristián Pérez y Eric Carrasco, con 18 y 15 puntos respectivamente. En los derrotados, destacó el goleo de Rodrigo Muñoz con 13, secundado por José Fuente, con 8. Para iniciar el partido Osorno alineó con Hernández, Pérez, Oyarzo, Méndez y Coro. Valdivia, en tanto, envió al parquet a C. Muñoz, R. Muñoz, Labrín, Fuentes y Prützmann. Aunque los del Calle Calle anotaron primero, rápidamente aparecieron las pérdidas de balón de los albirrojos (lo que fue la tónica del partido), y esto fue bien aprovechado por el elenco lechero, que comenzó a tomar ventajas (10-2 a falta de 5:52 por jugar). El CDV amagó una reacción, pero nuevamente volvieron los errores y así las cosas el cuadro local se llevó el cuarto por un claro 21 a 12. El segundo cuarto fue de poco básquetbol desde un comienzo. Osorno cayó en los errores, al igual que el CDV, y ello se tradujo en un festival de pérdidas de balón por ambos lados. En este parcial fue el cuadro del Rahue el que se mostró más desconcentrado, y ello permitió a los del Calle Calle acercarse en la cuenta, hasta ponerse 29-27 abajo en la cuenta a falta de 2.45 por jugar. Valdivia no mejoró en ataque y remontó mayoritariamente en base a tiros libres producto de las faltas de sus rivales. Los dueños de casa lograron conquistar dos puntos más que sus adversarios (3-1) para cerrar la primera mitad, con lo que ambos cuadros se fueron al descanso largo con ventaja para los lecheros por 32-28. Abriendo la segunda mitad se observó un duelo equilibrado. Las defensas se relajaron un poco, mejoraron las ofensivas y el parcial se mantuvo parejo dado el intercambio de canastas en ambos costados del campo. Así se llegó a un 40-38 a falta de cinco minutos por jugar. Luego, vinieron errores por ambos lados, pero fue el cuadro osornino el que supo mantenerse en control, mientras el CDV volvió al desorden y a las pérdidas de balón (cuatro casi consecutivas). El cuadro del Rahue cerró con un contundente 14-6 el parcial, y dejó el global en 54-44 (22-16) de cara a los diez minutos finales. Osorno entró dispuesto a liquidar desde el primero segundo del último cuarto. De la mano de una marca intensa, con un Eric Carrasco robando balones a cuanto jugador se le cruzó enfrente, el elenco lechero metió una racha de 12-0 en los primeros dos minutos treinta del periodo. El CDV, por su parte, sumó cinco pérdidas y dos tiros de campo fallados antes de conseguir su primera canasta, dejando las cosas 66-46 a 6.40 del final. Lo que vino después fue jugar por jugar. El cuadro del Rahue alargó sus posesiones, relajó un poco la marca y administró la diferencia para terminar ganando por un claro y merecido 71 a 55 (17-11) En resumen, en un partido con poco básquetbol, lleno de errores por parte de ambos cuadros (totalizaron 53 pérdidas entre los dos elencos), ganó el elenco que cometió menos errores, no el que jugó mejor, sino el que lo hizo menos mal. En todo caso, a pesar de la escasa calidad del juego mostrado, el partido tuvo la salsa que tiene todo clásico, lo que lo hizo entretenido y al menos sirvió para dar nueva vida al superclásico del básquetbol chileno. Solobasquet