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Con más de dos mil personas en el Gimnasio Monumental, los Toros cayeron abultadamente ante Valdivia por 75 a 94 en una nueva versión del clásico del básquetbol chileno.
Osorno inauguraba el marcador del partido, pero rápidamente, Valdivia lograba una racha de 8-0, e incluso lograba una diferencia de diez unidades cuando se ponía 6-16 con un poco más de cinco minutos de juego, puntos logrados principalmente desde 6.25. Osorno tuvo una remontada sobre el final del cuarto iniciada con un triple de Zúñiga y finalizada con un doble de Vera que cerró el periodo 15-17.
En el inicio del segundo cuarto, el juego fue impreciso para ambos equipos y con escasa conversión. Fue hasta los 6.18 cuando Cruces convertía un triple que dejaba a Osorno nuevamente en ventaja. Valdivia reaccionaba y se alejaba nuevamente a tres unidades, y fue Coro esta vez quien embocaba de tercera dimensión y empataba el partido. Una antideportiva de Von Bischhoffhausen hacía que los Toros lograran una pequeña diferencia de tres unidades, pero Valdivia reaccionaba rápidamente ante los errores defensivos de los locales y lograba sacar una ventaja de siete unidades, pero lanzamientos libres, dos de Mazur y dos de Carrasco cerraban el primer tiempo 35-38.
Osorno comienza el tercer cuarto extendiendo su racha del segundo cuarto 8-0 con dobles de Mazur y Paris, pasando nuevamente arriba (39-38) en el marcador con 8:15 por jugar. Los triples de Bravo y Heard volvían a distanciar a Valdivia en el marcador, dejando el partido 39-48 con 5:08 por jugar. Era el pequeño base valdiviano quien ponía de cabeza a la escasa marcación taurina y convertía dos nuevos triples y estiraba la ventaja 41-54. La defensa taurina hizo aguas durante todo el cuarto y ofensivamente la cosa no fue mejor, Rodrigo Muñoz completaba la masacre valdiviana con ocho puntos (dos triples) y cerraba el tercer cuarto 47-70.
Con el partido casi definido, Valdivia se dedicó a jugar posesiones largas y efectivas, que les permitía mantener la diferencia y jugar con tranquilidad. Osorno defendía presionando toda la cancha pero no lograba descontar ni convertir una racha que le permitiera meterse nuevamente en el partido. Con tres minutos todavía por jugar, el público que repletó el Monumental comenzó a dejar el recinto, dando clara señal de lo que se vivía en la cancha, Osorno sintió el golpe y no había reacción. Finalmente los valdivianos se llevaron nuevamente, una merecida victoria desde el Monumental, esta vez por 75-94 y silenciaron a un Monumental que desde hace mucho tiempo no recibía al público que se hizo presente en el recinto de Pilauco.
Osorno viajará la próxima semana a Castro y Puerto Montt, para enfrentar a chilotes y a la ULA.
Por: Miguel Gallardo Ríos
Fuente: toros.cl
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