TOROS Y LAS CINCO CLAVES DEL TRIUNFO MÁS IMPORTANTE DEL AÑO

Los osorninos lograron su cupo al Top 4 en un quinto partido jugado como visitantes Provincial Osorno derrotó a Llanquihue y sentenció, en la ciudad, lacustre, una llave que parecía imposible Los Toros lograron, este miércoles, el triunfo más importante del año. Así de simple. Una victoria sobre Llanquihue (85-80, en el quinto partido) que no sólo los clasificó al Top 4 de Punta Arenas, donde el 4 y 5 del próximo mes se verá las caras con Boston College, Liceo Mixto y UdeConce, sino que devuelve a los Toros al sitial de élite del que nunca debería haber salido. Fue una victoria para la ciudad, para la institución, para los casi doscientos hinchas que acudieron al municipal de Llanquihue, pero especialmente para un camarín que refuerza sus capacidades y que se hace más fuerte que nunca 1. Una defensa amurallada Era, sinceramente, para quedar boquiabierto. Es cierto, el ataque genera puntos, levanta a la hinchada y eleva la moral. Y si es espectacular, mejor aún. Pero la defensa que aplicó Provincial Osorno (ligado, obviamente al punto 3) fue inmejorable. Con Coro y Paris sin darle respiro a Chaine (que terminó con 13 trabajados puntos) y a los hombres altos lacustres, con Thornton taponeando como no lo había hecho en toda la temporada, con Figueroa y Cruces sacando de quicio a Leonel Méndez (aunque anotó 17, no fue ni la sombra del jugador determinante que es para su escuadra) y con Carrasco ayudando en las coberturas y ocupando los espacios donde podían penetrar los de Llanquihue, gran parte del triunfo se basó en ese punto. "Lo básico fue mejorar nuestra defensa y eso nos dio la tranquilidad para hacer nuestro juego", indicó Zúñiga 2 Paciencia, joven Padawan "A veces vamos ganando por 8 ó 10 puntos y nos apuramos igual. Lanzamos rápido, fallamos y nos anotan de contragolpe. A veces es mejor que se consuman los 24 segundos en ataque". Este ha sido, tal vez, el punto donde el director técnico Daniel Allende más ha hecho hincapié. Pero este miércoles, en el gimnasio Municipal, sus dirigidos tomaron nota y cumplieron su papel a la perfección. Como ejemplo claro, un botó: el partido del miércoles comenzó con un rotundo 10-0 para Llanquihue. ¿Se desesperó Osorno para remontar? Al contrario, continuó con su juego, moviendo el balón, buscando al hombre abierto, sin apurarse ni desesperarse. ¿El resultado? El primer cuarto finalizó con una ventaja de apenas 4 puntos (23-19). Quedó claro que las rachas rivales hay que responderlas con inteligencia. 3 Como para un maratón "Ellos no tuvieron el juego fluido que habían tenido en los partidos que nos habían ganado anteriormente en este estadio. Pero sabíamos que defendiendo y presionando en toda la cancha les íbamos a quitar piernas y eso se iba a ver traducido en fallas en los tiros exteriores. Por eso apostamos a presionar en todo el partido y jugarnos por tener el protagonismo y venir a buscar el triunfo". Daniel Allende, tras la victoria ante el "Monstruo del Lago", entregaba una de las pautas que llevaron a los Toros a quedarse con esta complicada llave Pero para poder realizar esa presión en toda la cancha y esa defensa asfixiante, es necesario un estado físico de primer nivel. Y eso fue lo que marcó la principal diferencia ante Llanquihue, lo que se pudo apreciar también en los partidos tres y cuatro (ambas victorias osorninas) en el Monumental. El trabajo del PF Rodrigo Isbej y la planificación del cuerpo técnico para la temporada, donde se contó con la colaboración del ex preparador físico taurino Fernando López (campeón de Dimayor en 2004) ya está rindiendo frutos 4 Las individualidades Claro, el trabajo en equipo siempre es vital para conseguir un triunfo aislado y una campaña exitosa. Pero en momento en que "las papas quemas", en que se necesita que aparezcan él o los jugadores "diferentes", la pelota tiene que llegar a sus manos. Cuando el primer cuarto del quinto partido Llanquihue parecía que iba a conseguir una diferencia casi definitiva, apareció Rodrigo Zúñiga con 10 puntos para calmar los ánimos locales. Después apareció Carrasco con rápidas penetraciones y Figueroa, con distribución de balón y puntos importantes. Emilio Paris jugó como en sus mejores tiempos (anotó 11 puntos, pero además atrapó rebotes y se impuso en la pintura) y un incombustible Pablo Coro defendió como los que saben. Además, cuando se le requirió, Isadore Thornton anotó puntos vitales para la victoria. Es decir, un plantel que además de jugar en conjunto, supo sacar rendimiento a sus figuras. Y de hecho, varios pudieron "reverdecer laureles" en esta llave, luego de no rendir lo suficiente en la fase regular ni en la etapa contra Valdivia. Ahora sólo resta esperar la situación de dos jugadores importantes que podrían no estar en Punta Arenas: Ronald Cruces (quien se lesionó el miércoles) y Cristián Pérez, quien arrastra una lesión desde hace semanas 5 Motivación al máximo ¿Quiere hablar de probabilidades?. Bueno, hablemos. ¿Tiene posibilidades de ganar un quinto partido como visitante un equipo que perdió ante Llanquihue los tres encuentros anteriores que jugaron en dicho recinto?, ¿y que comenzó perdiendo la llave por 2-0 y logró igualar tras ganar los dos en su casa?, ¿y tras pasar a esta etapa de los playoffs como mejor perdedor, luego de caer 1-3 ante Valdivia?, ¿y como si fuera poco, tras terminar la epata regular en la zona sur en el cuarto lugar, mientras que Llanquihue finalizaba como primero? Bueno, mucha gente pensaba que no. Pero, lo más importante, el plantel y cuerpo técnico creían que sí. Que sí se podía llegar a Punta Arenas, que sí se podía ubicar a Provincial Osorno, tras dos años y medio, en los lugares de cabecera de la Dimayor. Allí donde su historia lo coloca por camiseta, por peso específico "Estoy feliz, realmente feliz. Fue un partido muy intenso, pero dejamos todo en la cancha. Ahora sabemos que Punta Arenas se viene duro, pero lucharemos para ganarlo todo", manifestaba mientras celebraba el base Sebastián Figueroa, tras el duelo ante Llanquihue, de este miércoles. Previo a este cotejo, Erik Carrasco indicaba que "estoy muy motivado y quiero llegar al Top4. Y veo a mis compañeros con esas mismas ganas". Daniel Allende agregó tras la clasificación que "en Punta Arenas vamos a enfrentar a equipos muy buenos, pero lo importante es que hacía dos años que Osorno no estaba entre los cuatro primeros de Dimayor y volvimos a poner a este equipo donde queremos que esté". Motivación, garra y espíritu en su máxima expresión Por Miguel Montenegro Fuente: Diario Austral de Osorno